#Desmárcate, complicada palabra, y más en los tiempos que corren, y en unos lugares más que otros, para que lo vamos a negar.
Parece que fuera ayer cuando alucinabas con la posibilidad de enviar tu cv online a las empresas mediante hotmail o gmail o estrenabas perfil en portales online de empleo.
Se había acabado esa tortura mental y física de ir por las calles sin rumbo fijo, sin nada planeado, con tu mejor sonrisa ocultando el miedo y desespero, dejando el cv en todo establecimiento que se prestara.
Toda evolución es positiva, sin duda los portales de empleo funcionan, pero te los ofrecen tan baratos y sin explicarte su buen uso que también tienen efectos secundarios, y es que al final acabas igualmente agotado.
Aquí hay que estar, debes hacer un curso de, no tienes experiencia de, los años, los idiomas, una cantidad de factores a tener en cuenta que te acaban saturando y volviendo la búsqueda de empleo una pesadilla.
Un mal sueño que no se acaba con abrir los ojos, no, sigues ahí, cada día, cada mañana, con tu mayor empeño, retocando el cv a ver si cuela, buscando excusas para ver si esta vez no te dicen no por no cumplir alguno de los dichosos requisitos.
Se llega a tal punto de ansiedad que se pierde el norte, olvidamos ilusiones, en lo que nos hemos formado con mayor o menor esfuerzo, hasta lo infravaloramos, pensamos que no nos ha servido para nada, que hemos pérdido el tiempo, que nuestra vida ya no es vida, ya que sin empleo nuestro malestar mental merma las relaciones sociales, todo esto debido a que no nos encontramos bien, no nos aguantamos, mucho menos podemos pretender que nuestro entorno nos aguante.
Y es que hace mucho tiempo que me he dado cuenta de que estos portales no son la casa adecuada siempre, que no son la barita mágica, el genio de la lámpara al que pedir tres deseos, sencillamente están saturados y el nivel de frustración viendo requisitos tan curiosos como joven y con años de experiencia es bastante elevado.
Este hecho resulta irónicamente gracioso porque no puedes evitar aún sin ser de ciencias ponerte a calcular, y tan sencillo, como que en muchos casos, no salen las cuentas, no hay lógica, bueno si, la de quiero un becario que trabaje como un profesional que lleva en el sector tres o cuatro años, bueno, bonito y barato.
A esto también se suma la opción opuesta, demasiado mayor, ya no te lo gritan las empresas, te lo acabas gritando tú, cada día, cada hora que pasas frente a ese ordenador en el tedioso proceso de búsqueda de empleo, que decir de la autocandidatura, es que si me ven en persona ven que soy mayor o joven, mejor lo mando por email y quito la foto, un mar de sentimientos negativos que aumentan ante cada intento fallido.
El proceso de buscar empleo y la formación vienen de la mano, y por eso vemos como se abusa y se hace negocio, ahora vemos cursos de community manager, al que venden como la pieza clave de toda pyme, resalto a la pequeña empresa porque es la que más se puede confundir con esto debido a su necesidad de salir a flote, lo confunden como el gurú de sus ventas, de la salvación de su negocio, es más, hemos llegado hasta creerlo y ver como muchos se venden así, te gritan eso de como ganar dinero con las redes sociales, ya nos gustaría a muchos ver esos ingresos tan apetitosos y con poco esfuerzo según cuentan.
Tanto el social media como el coaching y el networking son palabras muy usadas hoy día, pero que son usadas según convenga.
Hace mucho tiempo que acudir al servicio de orientación profesional no me aporta nada nuevo, más bien nada, sin duda me aporta más una sesión con un buen coach donde me haga explotar, sacar todo lo negativo y positivo en mi beneficio, en el beneficio de mi vida personal y profesional.
Lo mismo me pasa con el networking, si lo haces bien, y con las personas adecuadas te aporta más visión laboral que la aburrida lista de empresas de trabajo temporal y cursos del SAE.
Quiero hablar con gente del sector, que de verdad me digan que hago mal, que necesito, como es la situación actual, compartir experiencias, información y contactos, no quiero que me abarroten la bandeja de entrada de mi correo con sesiones grupales en las que me enseñen a elaborar mi cv o como manejarme en estos portales de empleo online, eso cuando no te toca explicar a tí mismo que es EPES o te llevas la sorpresa que ha salido algún programa interesante que de verdad te abre puertas y no te han informado, lo has encontrado tú navegando en internet o te lo ha chivado un amigo, ya que lo esconden como secreto de estado.
Cansancio, incredulidad, falta de actualización de recursos y de visión, formación convertida en un negocio al que no se puede acceder, becas que supuestamente te deben informar en tu servicio de orientación y te enteras por otras vías, son tantos los motivos para dejar de hacer lo mismo y ver si se obtienen otros resultados que ya hemos pasado a ser nuestros propios motivadores, analizadores, networkers, social media managers, comerciales, orientadores, todo aquello que necesitamos aplicado a nuestras verdaderas necesidades, si no soy licenciado, no me mandes ofertas al email para licenciados, ah claro, lo haces para que tus jefes vean que orientas, pero perdone usted señor o señora orientadora, tenga un poco más de corazón y no me hunda más de lo que estoy, o peor aún ¿ no se ha molestado en ver mi cv ? ese tan bonito elaborado en el taller que para sumar horas en su servicio y poder acceder a una práctica remunerada me obligó a asistir por décima vez.