Una herramienta muy interesante y más que recomendable para el sector turístico son los fam trips.
Tienen quizás una fama algo injusta, más fama de ocio que de oportunidad de hacer contactos comerciales bastante interesantes.
Y es que ahí se trabaja, con el aliciente de conocer a compañeros de tu sector y romper la rutina del trabajo de captación de clientes diario.
Conocer nuevos destinos turísticos, nuevos establecimientos hoteleros, saber recomendar un buen flamenco show, o poder abrirle el apetito a esa persona que pasa por tu punto de información turística y te pide información sobre un buen masaje, lugares para tapear, monumentos , es decir, todo aquello que conlleva tener una estancia agradable que puede ser mermada por la falta de información.
Es cierto que cuando el volumen de trabajo no lo permite hay que centrarse en lo principal, y esto queda en segundo plano, cosa, que por desgracia, el cliente percibe, por lo que se encuentra desorientado en una ciudad de la que no conoce nada, más se complica si es una ciudad de un país distinto, con diferente idioma y costumbres.
A todo promotor turístico, agente de viajes, informador, guía y recepcionista se les presupone un elevado conocimiento de recursos turísticos, ocurre igual con los traductores, a los que se les presupone que en su memoria se les ha grabado el diccionario y todo su vocabulario como por arte de magia.
Y es que no es así, todo es un elaborado proceso de descubrimiento, de salir del mostrador u oficina para ir a descubrir y conocer lo que verdaderamente es recomendable para nuestros clientes.
Siempre le he tenido mucho respeto al mostrador, a la agencia de viajes en concreto, y es que cumplir las expectativas del cliente a nivel cultural no es labor sencilla, siempre he admirado la capacidad de conocer los recursos más atractivos de un destino que tienen estos profesionales y su capacidad de síntesis, de como hacer que el viaje sea lo menos pesado para el cliente, de evitar las escalas que no son necesarias en vuelos, buscar los horarios más adecuados, informar de cada detalle, visados, en general, hacerle sentir al cliente que todo eso que ha delegado en tí, saldrá perfectamente.
Generar confianza es algo que no viene ligado a un diploma, viene ligado a toda esa actividad complementaria que parece que no es necesaria, que carece de interés.
Pues lo tiene , y mucho, el dedicarte a conocer lo que vendes, los productos turísticos con los que trabajas, conocer a las personas que trabajan en estos mismos, en que hotel el recepcionista es más o menos majo, en que restaurante si tienes algún menú especial imprevisto te resolverán la papeleta y tus clientes no sentirán que te han creado más problemas por simplemente necesitar una dieta especial, un conjunto de factores, que sin duda, marcan la diferencia en este sector.
En estos tiempos en los que todos nos hemos vuelto libres usuarios de internet y de entrar a valorar todo vemos como hay sectores que están siendo muy cuestionados, como es el caso de los medios de comunicación y el de turismo.
Todo esto es debido a que son sectores en los que el usuario pone toda su confianza, necesita estos servicios, y los necesita bien prestados, sin manchas, sin dudas, trabajando por y para las personas que los demandan diariamente.
No se trata de una guerra entre agencias de viajes físicas o online, que si precios más o menos competitivos, se trata de la calidad del servicio que prestan.
Estudiando calidad, un tema que me interesa bastante, he aprendido que no se trata del precio elevado del producto o servicio turístico, se trata de que el servicio prestado o el producto cumpla con lo que el cliente necesita, que satisfaga su necesidad, que es por la que viene a pedirnos nuestros servicios.
Por lo que el reto de satisfacer la necesidad del turista que acude a nosotros como profesionales depende de muchos factores, entre ellos el precio, que sin duda siempre será tema de eterno debate.
Hay que intentar que no eclipse, explicar, no convencer, que el servicio tiene ese coste por determinadas razones, razones que daremos claramente, que el cliente note que son bien argumentadas y que el precio que pagará es el adecuado.
Un flamenco show, un masaje , una visita guiada, un viaje de luna de miel con un combinado Sri Lanka – Maldivas, productos con los que comercializamos y que debemos saber explicar al cliente porque contratarlo con nosotros y porque tiene ese coste.
Los fam trips son viajes para profesionales, que desde fuera, son vistos como viajes para pasarlo bien, en lugar de verlos como una herramienta obligada de trabajo, un profesional del sector debe conocer de primera mano los productos que comercializa diarimente, pero también debe estar actualizado, conocer nuevos, ya que el sector es muy cambiante y los gustos de los turistas cambian a la velocidad que lo hacen las tasas de aeropuertos.
Reuniones donde se nos presentan nuevos productos, donde nos explicarán como venderlos , a sacarles el máximo rendimiento, al igual que cursos de especialización en destinos, para mí , son herramientas fundamentales en mi trayectoria formativa y profesional.
Estudiar productos turísticos, investigar tendencias, conocer a los responsables de su promoción, , hablar con los compañeros de sector, ver como trabajan el resto de destinos, lo que hacen bien y mal, no para que salga esa vena ahora de protesta 2.0 en nuestros perfiles en las redes sociales, es todo una labor profesional que usarás para tí, para llegar a serlo , y si ya lo eres, seguir mejorando y no quedarte fuera del ritmo vertiginoso del sector.
Veo mucho, en concreto con las agencias de viajes y touroperadores, que todos estamos lanzando nuestra opinión al respecto, independientemente de si conocemos o no el sector y como se mueve internamente.
Como soy de España, hablaré del caso marca España, turismo, que por lo visto interesa mucho, ya que en estos tiempos de crisis, está muy en el punto de mira.
Y es que se llega a confundir el trabajo de las grandes entidades como patronatos, con el de los pequeños establecimientos.
El volumen de turismo que tenga un país, una ciudad, depende de un trabajo conjunto, entre estas grandes entidades, y los establecimientos que prestan los servicios turísticos.
Pero cada uno tiene una forma de trabajar diferente, que se rige por unas normas internas, lo que en realidad y todos comparten es el saber hacer, el tratar bien a esos turistas que acuden a tu ciudad y a sus establecimientos, y creo que en eso, España está bastante bien valorada, claro que aún hay mucho que se puede hacer, pero es que en este sector tan amplio, siempre hay mucho que hacer y mejorar.
En cuanto a la atención al público cada vez somos más conscientes de su importancia, de hecho la llamada revolución del social media , si es que es tal, viene de ahí, de querer mejorar nuestra comunicación con el cliente, el neuromarketing, las sensaciones, la marca personal, el dejar huella, todo eso no es ninguna revolución, es evolución , evolución en las formas de atención al público.
Esto ha llegado también a los fam trips, ahora blogtrips, que para romper con esa imagen obsoleta, del todo cerrado, se abren las puertas, el corazón de los profesionales, todo en beneficio de su ciudad, para que gracias a las herramientas de comunicación online su alcance sea el mayor, y poder mostrar a todos los interesados los recursos turísticos de la ciudad a la que representan, todo esto, de manera real, a tiempo real, sin trampa ni cartón, siendo personas, dejando el mostrador, la corbata, y enseñando lo mejor y las mejores experiencias.
Turismo social y tailor made 